Ir al contenido principal

Mi primer video: la humillación de un border

Finalmente pude sentar a mi mamá y hacer que me explicara eso de editar películas. La verdad que era tanto lo que había cacareado que ella sabía hacerlo, que esperaba algo espectacular, pero debo decir que sus conocimientos dejan bastante que desear así que hice lo que pude con lo poco y nada que ella me enseñó, y el material que me pasaron de contrabando (harto rasca por cierto, habrá que hacer las gestiones necesarias para conseguir algo de mejor calidad); se supone que yo no he visto –y mucho menos tengo– ninguna de las fotos o vídeos que aparecen en mi primer montaje, pero como siempre, puse mis ojitos de gatita linda y la Conqui no se pudo resistir a mis deseos por mucho que su hermana, mi tía, la tuviera amenazada con las penas del infierno si pecaba de indiscreta. Vieja gritona, que agradezca mi interés en su hija en vez de enojarse con mi mamá por lo que yo hago o no hago, digo o no digo…. ¿Y saben qué? en vez de enojarse, mejor que agradezca mi porque después de todas las horas que he pasado aprendiendo a editar el video de la Mila, algo debo querer a la perra de mi prima a pesar de todo lo que me gusta tomarle el pelo. Confieso que después de ver como juega con sus hermanas y las cosas que le hacen, me dio ternura ver tanta inocencia; para que nos andamos con cuentos, ella es el fiel reflejo de cómo los perros ven a sus humanos como dioses, al igual que yo soy el fiel reflejo de como los humanos ven a sus gatos como dioses… tan parecido pero tan distinto.

Pero vamos a lo que nos convoca: el video de mi prima y  la relación con sus hermanas parece confirmar la vieja teoría de que las rubias son tontas, pero yo prefiero pensar que las tontas son las mamás de las rubias que no les enseñan a morder o arañar cuando las molestan ¡pobre perra! si a mi me columpiaren en una manta roñosa ¡me pondría furiosa! ¿se dieron cuenta de los hoyos que tiene la mantita de la pobre Mila? ¡una vergüenza! pobre perra, primero la maltratan poniéndole bozal y después la humillan con una manta lo menos digna de una señorita… Que poco digno.

La Mila… inocente pajarito que aún no sabe que perseguir su propia cola no la llevará a ninguna parte: voy a tener que enseñarle varias cosas cuando venga para las vacaciones de septiembre.

Entradas populares de este blog

"Ser animado racional, Varón o mujer"

Ayer me dijeron que yo nunca mencionaba a los hombres y que siempre hablaba de mi mamá, mi abuela, mi tía y mis primas, todas mujeres. También me dijeron que lo más cercano que yo había estado de hablar de algún espécimen de sexo masculino, había sido cuando comentaba las tonteras que hacía el Manchi. Al principio como que me dio lo mismo la pregunta porque no entendí de qué me estaban hablando, pero igual me quedó dando vueltas y pensando en todos los humanos que conozco y con los cuales he convivido en mayor o menor grado, me di cuenta que no conozco a ningún hombre; es decir, tengo una idea de como son porque he visto algunos a la pasada, como los señores que le ponían bencina al auto con una manguerita cuando nos vinimos con mi mamá del sur o el caballero que cortaba el pasto en la casa, pero eso sería todo. Como siempre que algo despierta mi curiosidad, le pregunté a mi mamá sobre el tema pero parece que no me entendió porque se quedó muda, aunque confieso que me tinca prefirió ha...

Maniobra de Heimlich

Lo confieso: he estado ociosa los últimos días, pero tengo una excusa muy buena, y es que… naaaaa, no tengo excusa posible; me podría inventar alguna, pero si algo me ha enseñado mi mamá es que mentir es malo y que uno siempre debe asumir la consecuencia de sus actos, sobre todo cuando ha metido la pata, y ella sí que sabe de meter la pata ¡si yo les contara! ¿Saben cuál fue la última? ¡Ponerle demasiado peperoncciono a la carbonada! Vieran como tosía mi abuela cuando la probó por primera vez… ¡Cof! ¡Cof! ¡Cof! hacía la pobre vieja mientras los ojitos se le ponían brillantes tratando de retar a mi mamá por lo picante de la comida. Cómo sería el escándalo que yo estaba en el cerro e igual escuché todo el barullo y volví corriendo a la casa para ver que estaba pasando y si podía ayudar en algo, no sé, tal vez haciéndole la maniobra de Heimlich a la veterana ¡y no se rían! es tan flaquita la señora que estoy segura que si agarro vuelo y salto sobre sus pulmones, cualquier cosa que estuvi...

El Manchi (y el sexo)

El Manchi es una especie de hermano que tengo yo. La Conqui dice que es “allegado” porque no es de ella si no que de los dueños del sitio dónde ella arrienda cabaña. Siempre me cuenta, muerta de la risa, que lo primero que le dijeron al arrendar, es que el gato estaba para cazar ratones y que no lo dejara entrar a la casa y mucho menos le diera comida. Ella, lo primero que hizo el día que llegó fue dejar entrar al Manchi cuando él llegó a controlar quién había invadido su territorio; y lo segundo, fue darle de comer cuando quiso quitarle la hallulla que ella se estaba comiendo. Esa noche el Manchi durmió sobre la cama nueva de la Conqui y al día siguiente tenía platito de Hello Kitty para la cómica y el agua y una enorme bolsa de comida a su completa disposición Lo del platito de Hello Kitty puede ser algo femenino para un macho recio, pero les voy a contar una copucha: hasta que llegué yo la Conqui pensaba que él, era ella. Así mismito. Como no le colgaba ningún adorno al pobre animal...