Ir al contenido principal

Segunda lección de manejo

Han sido días raros estos, con una sensación de despedida que me tiene un poco melancólica, sobre todo porque noto a la Conqui preocupada. Aún no me ha dicho oficialmente que nos vamos a Viña, pero ayer la escuché hablar largo por teléfono con mi abuela planificando el viaje, y después con alguien más que no supe quién era pero que no me quiere porque escuché que la Conqui le decía “respeto tú opinión pero no voy a regalar a la Melí”… y yo soy la Melí, y si quiere que me regalen es porque no me quiere… ¿cómo puede alguien no querer lo que no conoce? Me dio pena ver a mi mamá llorando así que me acerqué a buscar su mano para decirle “aquí estoy”, y ella me tomó en brazos y me dio hartos besos de esos llenos de loros que me cargan, pero estaba tan triste que yo me quedé tranquila dejando que me usara de pañuelo.

Bien pesada la persona que dejó triste a la Conqui, si algún día la conozco la voy a ignorar, o le haré fuuuu por antipática. Yo no soy una mala gatita, nunca he roto nada en la casa, siempre he hecho pipí y caca en mi cantora, no me robo la comida de los humanos, no maullo para molestar, soy limpia, sanita, linda y muy agradecida de todo el cariño que me dan. Y soy tan inteligente que lo huasa que puedo ser ahora, se me va a pasar luego con un poco de paciencia; aprendo rápido y con tal de estar con la Conqui, me amoldo a todo.

Hoy día por ejemplo, de nuevo salimos de paseo en auto y parece que me está gustando más: fuimos a Puerto Varas a comprar pan. Los primeros 2 minutos maullé harto, pero debo haber sido por el calor ya que la Conqui prendió una cosa que se llama aire acondicionado y al tiro refrescó y yo me tranquilicé y me acosté en el asiento de atrás. Un pedazo del camino el auto saltó harto porque íbamos por camino de tierra, pero después salimos al pavimento y yo me animé a levantarme y mirar por la ventana: vi hartas casas y otros autos y perros en la calle. Después de un rato llegamos a una casa blanca con un cartel afuera que decía “Panadería”, ahí la Conqui se estacionó y me conversó un poco antes de bajarse: “Melí, voy a comprar pan y vuelvo, no te mueves y pórtate bien”, me acarició debajo del cuello y detrás de la oreja porque sabe que me gusta mucho, y se bajó. Yo me quedé en el asiento de atrás mirando por la ventana y la vi entrar a la panadería. Mientras ella compraba el pan, pasaron varias personas caminando al lado del auto y todos se quedaban mirándome  con cara de sorpresa ¿será porque soy de verdad linda o porque no están acostumbrados a ver gatitos en el auto? Raros los humanos… si ellos van todas partes en auto ¿porque no podemos hacer lo mismo los gatos? es cosa de aprender.

(Gatita linda en el auto)

Entradas populares de este blog

"Ser animado racional, Varón o mujer"

Ayer me dijeron que yo nunca mencionaba a los hombres y que siempre hablaba de mi mamá, mi abuela, mi tía y mis primas, todas mujeres. También me dijeron que lo más cercano que yo había estado de hablar de algún espécimen de sexo masculino, había sido cuando comentaba las tonteras que hacía el Manchi. Al principio como que me dio lo mismo la pregunta porque no entendí de qué me estaban hablando, pero igual me quedó dando vueltas y pensando en todos los humanos que conozco y con los cuales he convivido en mayor o menor grado, me di cuenta que no conozco a ningún hombre; es decir, tengo una idea de como son porque he visto algunos a la pasada, como los señores que le ponían bencina al auto con una manguerita cuando nos vinimos con mi mamá del sur o el caballero que cortaba el pasto en la casa, pero eso sería todo. Como siempre que algo despierta mi curiosidad, le pregunté a mi mamá sobre el tema pero parece que no me entendió porque se quedó muda, aunque confieso que me tinca prefirió ha...

3 copuchas y 1 comentario

Vamos con las copuchas primero... ¡El papá de la Mila salió en la televisión! ¡Y dos veces! Casi casi que la envidio porque ella tiene papá y yo no, y más encima debe ser importante para que salgan entrevistándolo en la tele. Mi mamá lo vio anoche y me dijo que en el traje que uso para la entrevista se notaban los pelos de la Mila, así que yo me pregunto… ¿eso quiere decir que mi prima también salió en la tele o los puros pelos no cuentan? En todo caso se veían lindos sus pelos rubios sobre el traje oscuro, le daban un toque “cachual” súper dominguero que ojalá mi tío supiera apreciar en vez de andar reclamando por la vida contra los pelos de su hija  cuadrúpeda. Hoy ando en la buena con mi abuela, por mucho que me tire la cola debo reconocer que a veces tiene algunas ideas brillantes que van en directo beneficio mío ¿la última? ¡Calentarme mi ñam ñam! Resulta que mi mamá a la hora de almuerzo me da un tercio de mi latita con paté de salmón y lo que sobra lo guarda en un e...

El paseo

¡Lo pasé bomba en mi pijama Party! y debo confesar que no tenía ninguna gana de volver a mi casa ¿la verdad? es más entretenido vivir rodeada de niños que corren de un lado para otro, que convivir con un par de viejas lateras y que ya me conozco de memoria.   El viernes partí a alojar con mi mamá a Santiago y luego de un viaje relativamente corto, llegamos a la casa de la Mila como a las 4 de la tarde. Durante el camino me porté bien; me fui tranquila en el asiento de atrás escuchando lo que la abuela y la Conqui iban conversando, a veces metía la cuchara y soltaba un miau participativo para que no se fueran a olvidar de mí.  Nos demoramos poco, algo memos de hora y media ¡nada que ver con el viaje desde Puerto Varas a Viña! y entre subidas y bajadas del camino se hizo de noche y de día dos veces: según la Conqui no es que se escondiera el sol y volviera a salir, si no que entramos a unas cosas que se llaman túneles y sirven para acortar camino… ¡podrían hacer un túnel pa...